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Cronología 1977 - 1982
Nueva vida 1978-1982 Años activos pero nostálgicos 1978 es un año animado. Exposiciones importantes son anunciadas: Bruselas, Londres (Dada and surrealism Reviewed), Viena (Surrealismus aus der Sammlung: The Museum of Modern Art, N.Y.), Turín. Lam regresa a Albisola después de sus inauguraciones. En agosto, trabaja en el taller de Giorgio Upiglio, en Milano. Un ataque cerebral lo abate de pronto. Hospitalizado varios meses en Milano, luego en Santo-Gall, Lam no puede asistir a las retrospectivas de su obra en Dinamarca y Noruega. Sale del paso, paralizado a la mitad y clavado en una silla de ruedas. A pesar de esto asiste en México a la exposición Wifredo Lam, colección del Museo Nacional de Bellas Artes de La Habana, Cuba, y a la manifestación Expresión afrocubana organizada en Nanterre en 1979. Su obra La Jungla es presentada en el centro Georges-Pompidou durante dos meses. Lam participa también a la exposición colectiva que celebra el 20mo aniversario de la revolución cubana en el palacio de la Unesco. En abril, rinde homenaje a su amigo desaparecido Pierre Loeb, participando a la exposición La Aventura de Pierre Loeb, la Galería Pierre, París 1924-1964. Su amigo Alain Jouffroy le dedica un número especial de la revista Siglo XX, a la cual participan todos los amigos del pintor. A pesar de su minusvalía, Wifredo no deja de crear dibujos, grabados, cerámicas y esculturas. Pero no soporta de sentirse disminuir. Lo que engendra en él una gran nostalgia del país natal al mismo tiempo que cierta forma de repliegue. Desde entonces, pasa varios meses al año en Cuba. Va a La Habana en abril 1980 para seguir un tratamiento en el hospital Frank-País. Es entrevistado por el realizador Humberto Solas que continúa su película sobre el artista. Es allá dónde se entera del fallecimiento en París, el 24 de abril, de Alejo Carpentier. Desaparición cruel de un compatriota y uno de los últimos testigos de sus jóvenes años. Carpentier, según su última voluntad, es enterrado en Cuba el 28 de abril. Lam puede por lo menos rendirle homenaje. Después de lo cual, Wifredo vuelve a Europa para pasar el verano en París. Regresa a Cuba dos meses en el curso del invierno de 1981. Durante esta estancia, conversa con Antonio Núñez Jiménez, quien comienza a escribir una biografía del pintor. Está de regreso a París para participar a la exposición París-París 1937-1957, en el centro Georges-Pompidou. Poco tiempo después, participa al coloquio dedicado a Picasso en el palacio de la Unesco. Este mismo año, tres distinciones le son otorgadas: Francia lo nombra Comendador del orden de las Artes y las Letras; Cuba le concede el Orden Felix-Varela de Primer Grado y es gratificado con la Orden de combatiente internacional para su participación a la guerra civil española. Siempre activo Lam realiza, en 1982, seis grabados para ilustrar La Hierba bajo los adoquines, una colección de cinco novelas escritas por Jean-Dominique Rey, el comparsa de Alain Jouffroy desde el liceo. Pero la última intervención de Lam consistirá en terminar Anunciación, unas aguafuertes acompañando los poemas de su amigo Césaire. Un encargo que data desde 1969. En junio, se abre, en la galería Pierre Matisse de Nueva York, una exposición de sus obras realizadas entre 1942-1951. A pesar de su fidelidad a esa galería desde hace 40 años, Lam no puede ir. Después del verano pasado en Albisola, vuelve a París dónde fallece el 11 de septiembre. Es incinerado en el Père-Lachaise y su familia, respetando su voluntad, va a Cuba para devolver sus cenizas a su suelo natal. A partir del 20 de octubre, comienza en Madrid – la primera ciudad donde vivió llegando a Europa – una exposición Homenaje a Wifredo Lam 1902-1982. Luego es presentada en Bruselas y en París. Funerales nacionales son organizados el 8 de diciembre de 1982 en La Habana, durante los cuales Lou, en presencia de Fidel Castro, deposita las cenizas de Wifredo en el cementerio Colón. Anne Egger (Traducíon Peggy Bonnet Vergara) |