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Cronología 1951 - 1962
Comparte su tiempo entre Cuba y París (1951-1957) En febrero de 1951, son inauguradas, en La Habana, las pinturas murales realizadas por Lam, Amelia Peláez, René Portocarrero, Carlos Enríquez, Jorge Rigol, Carmelo Gonzales Iglesias, Enrique More, para adornar las oficinas de Esso Standard Oil Compagny (en el barrio del Vedado). Fue la ocasión para Lam de encontrar al periodista y militante antigubernamental Carlos Franqui, quien prologará el catálogo de su exposición personal, celebrada poco después en La Habana, en la galería Sociedad de Nuestro Tiempo. En abril, Lam recibe el primer premio del Salón Nacional de Pintura, Escultura y Grabado de La Habana con su obra Composición. Es el tiempo de los reconocimientos. Su divorcio es pronunciado en mayo de 1951. Luego, embarca hacia Europa por varios meses. Confía su casa a su amigo, el escritor cubano de inspiración surrealista y realizador de cine, Edmundo Desnoes y su esposa María Rosa. Durante el verano, Lam realiza, para sus amigos surrealistas, el frontispicio del número especial de la nueva revista La Edad del Cine, fundada por Adonis Kyrou y Robert Benayoun y dedicada al movimiento. Entre los nuevos miembros: Jean Schuster, Jean-Louis Bédouin, Michel Zimbacca, Nora Mitrani… En Europa, sus cuadros participan a las exposiciones de CoBrA. Es invitado a la segunda gran exposición internacional de arte experimental que se celebra en el Palacio de Bellas Artes, en Lieja. Sus dibujos ilustran el número de la revista CoBrA de septiembre. Dictadura y nuevo exilio (1952)De regreso a La Habana, Lam se preocupa por la evolución política de la isla, después del golpe de Estado fomentado por Batista, el 10 de marzo de 1952, que reinstala la dictadura con el apoyo del ejército. Esto deja presagiar el fin de la Constitución, la proscripción de los partidos políticos, la censura de la prensa, la represión de los opositores y el aumento de la corrupción… Lam prefiere dejar la « república bananera » y vivir en París dónde se instala a finales de agosto y donde se pone de nuevo a trabajar. Prepara una exposición personal en Londres y ilustra los aforismos de René Char reunidos en A la salud de la serpiente. Sigue, de cerca, la fundación de la revista Fases, por el surrealista Édouard Jaguer, Anne Ethuin, Jean-Louis Bédouin, alrededor de Pierre Alechinsky, Corneille, Götz, Max Walter Svanberg. El denominador común de artistas tan diferentes es la práctica del automatismo. El cubano es atraído por este movimiento « sin manifiesto ni teoría hecha » o, más poéticamente, por esta « concepción moderna de la magia ». Su palabra de orden, tomada a Breton, sería: « ¡Toda licencia en arte! ». En febrero de 1953, Lam es invitado a presentar algunas telas suyas en la galería A la estrella sellada, abierta el año anterior, y cuya dirección artística ha sido confiada a André Breton. La exposición colectiva, dedicada al surrealismo, reúne Ernst, Tanguy, Man Ray, Toyen, Paalen y Lam. Después, Lam encuentra Picasso en Mougins, donde asiste con él a una tauromaquia. De regreso a París, asiste a ciertas reuniones de los surrealistas en el café de la plaza Blanca. Pero sin afiliarse al movimiento. Así como en política, queda siempre independiente. Por otro lado, está presente en las citas dominicales organizadas en Châtillon por los amigos martiniqueses de Césaire, el Dr. Auguste Thésée y su esposa Françoise. Después de una comida criolla, las tardes son dedicadas a discusiones desenfrenadas donde Lam puede entregarse a una de sus otras pasiones: la economía política. Lam ilustra diferentes obras: El Árbol y el Arma, de Dotremont, al lado de Alechinsky, Hérold y del escultor americano de origen japonés Shinkichi Tajiri y La Muralla de ramitas, de René Char. Realiza la portada de Mapa negra, de François Valorbe, una colección de poemas inspirados por los grandes músicos negros de jazz. Durante el verano, Lam se entera de las últimas noticias de Cuba y de la reacción armada llevada por Fidel Castro contra Batista. Lo que se conoce como el « Movimiento del 26 de julio » fue un fracaso. Castro y sus compañeros, entre ellos Carlos Franqui, son condenados a 15 años de prisión pero purgarán su pena hasta 1955, antes de irse al exilio en México dónde encontrarán a Ernesto Che Guevara. En septiembre, Lam va a Italia para exponer al lado de 12 artistas de la Escuela de París, una manifestación organizada por Christian Zervos. Lam recibe la medalla de oro del Premio Lissone, concedido a los extranjeros, con su obra La Fiancée. El tiempo de los vagabundeos 1954-1961 En enero de 1954, en París, Wifredo conoce al joven escritor y crítico de arte Alain Jouffroy, excluido del movimiento surrealista cuatro años antes. Encuentra también, en el entorno de Fases, al poeta rumano Gherasim Luca, instalado en París desde el 1952 – este amigo de Brauner y de Hérold es un apátrida a la voz profunda que explora el lenguaje con inquietud y exigencia. También encuentra al pintor danés Wilhelm Freddie, en exilio por causa de obras escandalosas. Lam participa por primera vez al X° Salón de Mayo, al cual quedará mucho tiempo fiel. Esta manifestación, imaginada en 1943 para defender el arte moderno y resistir al nazismo y su concepción del arte degenerado –, se celebra regularmente desde 1945. Sus fundadores y organizadores son Gaston Diehl, Jacqueline Selz, Yvon Taillandier. Jorn lo invita oficialmente, con el ceramista Tullio Mazzotti, a los Encuentros internacionales de escultura y de cerámica que deben celebrarse en agosto de 1954 en Albisola (Italia), una pequeña ciudad balnearia de la costa ligur, cuya tradición con el barro data del Renacimiento. Esos días, dedicados al trabajo en equipo y a la experimentación, son animados por Jorn y Enrico Baj, creadores del « Movimiento internacional para un Bauhaus imaginario ». Son presentes Appel, Corneille, Matta, Sergio Dangelo, Édouard Jaguer… Pero Lam llega tarde, cuando todo el mundo ya se fue. Sin embargo, queda encantado por la región y se promete volver. El viajero infatigable regresa nuevamente a La Habana para preparar una exposición que debe efectuarse en la Universidad. Es presentado a los grandes coleccionistas de Chicago, Edwin y Lindy Bergman que adquieren varios cuadros suyos. En París, Lam instala su domicilio en la Ciudad universitaria y su taller, no muy lejos, en la Villa Alesia. Se queda cerca de los surrealistas – ilustrando el número 4 de la revista Médium – y en particular de Benjamin Péret quien lo describe como « el brujo africano y el shaman asiático que, si por acaso, se unen en él para prolongarse ». Realiza una serie de grabados para la selección del poeta martiniqués Édouard Glissant: La Tierra inquieta. En mayo de 1955, se va a Caracas para la inauguración de su exposición personal. Fue invitado al Instituto franco-venezolano, donde su director Diehl pronuncia una conferencia sobre su obra, Rimbaud y Lam. También encuentra a Carpentier que vive allí en el exilio. Encuentra al arquitecto Carlos Raúl Villanueva que le encarga un mural. De nuevo en París, a finales de junio, Lam encuentra a la joven artista sueca, Lou Laurin, en la galería del Dragón, durante una exposición de artistas latinoamericanos. En septiembre, se va a Suecia. La Galería Colibrí de Malmö lo invita a participar a la exposición colectiva « Imaginisterna » con artistas cercanos a CoBrA. Toma el tiempo de visitar el país y de ir a Falun para encontrar a Lou Laurin y conocer a su familia. Lam regresa nuevamente a Caraca, donde bajo la dirección de su amigo Villanueva, que está edificando la Ciudad universitaria, se le confía la realización de una gran fresca para el Jardín botánico. Luego, a principios de 1956, en compañía de Nicole Raul, emprende una expedición a Mato Grosso. El sobrevuelo en avión del Maroni, del Orinoco y del Amazonas le permite descubrir los grandes bosques vírgenes. Viven algunas semanas en un campamento de buscadores de oro y piedras preciosas. Afectado por la « enfermedad verde » (tipo de clorosis), debe regresar a Cuba para curarse. Lam se restablece rápidamente para preparar su exposición en la universidad y realizar el encargo de un gran mosaico para el Centro Médico del Vedado. Se entera por correo de la ruptura de Césaire con el partido comunista. En su Carta a Maurice Thorez del 24 de octubre, el martiniqués manifiesta su desaprobación del sectarismo del PCF que repugna « a comprometerse en la vía de la de-stalinización ». Lam, anti-dogmático, aprueba la reacción de su amigo. Mientras que el pintor está a punto de partir de la isla, Fidel Castro regresa clandestinamente a Cuba con algunos exiliados y se refugia en las montañas de la Sierra Maestra para empezar la guerrilla. El Centro de Bellas Artes de Maracaibo, segunda gran ciudad de Venezuela, presenta una exposición personal de Lam en febrero de 1957. Luego, el Jardín botánico es inaugurado en Caracas en presencia de Wifredo. Está de vuelta en Europa antes del verano. Pasa los meses de agosto y de septiembre en Italia con Lou Laurin. Van a Milano para encontrar a Brauner, Manzoni, Baj, Roberto Crippa y Fontana. Permanecen algunos días en Venecia, donde el azar los hace encontrar a Elisa Breton, Jean-Jacques Lebel, Bona y André de Mandiargues. El pintor comparte con éste el amor de Italia y cierto interés por lo oculto y la magia. En fin, se van a Albisola para encontrar a Jorn, quién se acercó a Guy Debord. Es la fundación del movimiento Internacional situacionista. En noviembre, Wifredo y Lou despegan hacia México. Desembarcan en México el día de los funerales del muralista Diego Rivera. Lam encuentra a uno de sus antiguos compañeros españoles, Anselmo Carretero, y también a la ex mujer de Péret, Remedios Varo, quien le presenta a Leonora Carrington y al coleccionista Edward Silence. Frecuentan también a numerosos refugiados procastristas por intermedio de su amigo Carlos Franqui, encarcelado y torturado por Batista: entre ellos, el médico Martha Frayde, el sindicalista Lázaro Peña y el compañero de facultad de Castro, Alfredo Guevara. Recorriendo el país, Wifredo se entera de la muerte de su hermana Eloísa. A finales de febrero de 1958, la pareja sale de México hacia Cuba. Wifredo hace descubrir La Habana a su compañera: una ciudad dinámica y festiva, aunque corrupta. Están preocupados por el clima represivo contra la guerrilla castrista. Varios amigos del pintor son detenidos. Encuentra a Mandiargues, de paso en la isla, y conversa con el poeta surrealista cubano José Álvarez Baragaño, que prepara una monografía sobre su obra, antes de decidirse a marcharse de Cuba. Antes de irse, Lam quema algunos grandes lienzos que no lo satisfacían y confía algunas obras a su hermana Augustina. Se entera del nacimiento en París de Stéphane, el hijo que tuvo con Nicole Raul. El 9 de abril, día de la huelga general, Lam y Lou embarcan para Míami y luego para Nueva York, donde se encuentran algunos compañeros suyos como Jesse Fernández, Carlos Rigaudias, Eugenio Granell. Regresan a Europa y pasan el mes de agosto en Albisola en casa de Crippa, luego en casa de Jorn. Después se van a Rappallo donde Enrico Baj trabaja la cerámica. Wifredo se entusiasma de descubrir un medio libre y amistoso, favorable a la creación y a la emulación artística. En octubre, en Chicago, Lam es elegido miembro de la Graham Fundation for the advanced studies in the Fine Arts. Chicago es entonces una ciudad de coleccionistas: los Neumann o los Maremonts para el arte del siglo XX, Muriel Newmann para el arte americano después de 1945, los Bergman y los Shapiro para el arte surrealista. Apenas de vuelta en Europa, Lam se informa de noticias procedentes de Cuba: los combatientes del « Movimiento del 26 de julio » (como recuerdo del asalto de 1953) cogieron a la ciudad de Santa Clara y están a punto de entrar victoriosos en Santiago de Cuba y La Habana. Batista debe huir. La revolución cubana tan esperada está en marcha, la toma del poder por Fidel Castro, el 8 de enero de 1959, se acompaña de reformas que Lam y sus compatriotas esperaban con impaciencia. No obstante, Lam no regresar a vivir en Cuba, como Alejo Carpentier. En París, frecuenta a Marcel Zerbib, director de la Galería Diderot y editor. El encuentro fortuito, una tarde, con Max Ernst y su esposa Dorothea Tanning da lugar a una ilustración colectiva, con Matta y Hérold, de Palabras pintadas, unos poemas de Alain Bosquet. Lam participa a la Documenta II de Kassel, una manifestación iniciada en 1955 por Arnold Bode, un artista que fue prohibido bajo el régimen nazi. La idea era de reconciliar el público alemán con el arte moderno y de reunir todas las fuerzas vivas de la creación en un espíritu de apertura multicultural, dicho evento se desarrolla, cada cinco años, durante cien días. En este año 1959, más de 1 800 obras de 300 artistas han sido seleccionadas. Lam es presentado al poeta y crítico de arte Hubert Juin, posiblemente por René Char o por Aimé Césaire, Juin había escrito un libro sobre el Martiniqués en 1956. Lam ilustrara entonces la obra que Juin publicara en 1960: El Viaje del árbol. También realizara litografías que « comentará » a su modo Alain Jouffroy. Después del Salón de Mayo y una exposición en Venecia en junio-julio, Wifredo y Lou pasan el verano en Albisola. Luego se van a los Estados Unidos y se casan en Manhattan el 21 de noviembre de 1960, antes de dirigirse a Chicago, invitados por Lindy y Edwin Bergman. Allí frecuentan a otros coleccionistas como Jory y Joseph Shapiro, Claire Ziesler, Ruth y Leonard Horwich, y al vendedor Richard Feigen. Las conversaciones sobre el arte son probablemente apasionantes y las sobre la situación cubana deben ser sin duda delicadas, debido a las medidas que toma el gobierno americano como ruptura diplomática, embargo sobre los productos cubanos… Wifredo deseaba sostener la orientación internacionalista y antiimperialista preconizada por el régimen revolucionario. Pintura y vida familiar 1961-1962 Después de estos largos meses de ausencia, Wifredo y Lou quedan sorprendidos por el clima que había en Francia, entonces comprometida en la guerra de Argelia. Los extranjeros son mal vistos y el cubano, que soporta mal la discriminación, toma la decisión de compartir su tiempo entre Zúrich y Albisola. Su instalación en Suiza se acompaña de un nuevo interés por el grabado. Realiza algunos grabados para La Extrema Occidental de su amigo Gherasim Luca, con Arp, Brauner, Hérold, Matta, Tanning, y también para la galería Mathieu y La Obra grabada. Lam se interesa por los acontecimientos cubanos: el fracaso del desembarco en la Bahía de Cochinos, sostenido por los Estados Unidos, o la ayuda de la Unión Soviética. El mismo año es proyectado el documental de Cris Marker, Cuba si, en ocasión al primer aniversario de la revolución cubana, esto retiene la atención del pintor. También es emocionado por el nacimiento, en Copenhague el 24 de mayo, de su hijo Eskil. La familia pasa el verano en Albisola donde alquila una casa, cerca de la de Jorn. Con su amigo, se ejercita en la cerámica. Anne Egger (Traducíon Peggy Bonnet Vergara) |